El carbón dulce o carbón de Reyes, es un dulce típico de las navidades que se lo dejan los Reyes Magos a los niños y niñas que han sido traviesos, o que no se han portado bien durante el año.
Cuando los niños y niñas no han tenido un buen comportamiento, los Pajes se lo cuentan a los tres Reyes Magos y estos les llevan carbón. De esta manera saben que siempre están vigilados por los pajes y los mismos Reyes.
Actualmente el carbón de Reyes es una golosina de azúcar, pero antiguamente era carbón real, un regalo muy valioso entre la población más humilde porque produce luz y calor.